Número – 192
- Se trató de un intento por iniciar un proceso de transformación profundo en el país: Laura Itzel Castillo.
En Sesión Solemne, el Senado de la República honró la memoria de maestros, estudiantes y campesinos que participaron en el asalto al Cuartel de Ciudad Madera, Chihuahua, quienes -cansados de los abusos, explotación y despojo-, no encontraron alternativas por la vía pacífica para enfrentar al poder de caciques y terratenientes.
La presidenta del Senado de la República, Laura Itzel Castillo Juárez, expresó que se trata de un acontecimiento de suma relevancia en la historia contemporánea de México, en la que un grupo de jóvenes entregó su vida para reivindicar la lucha por la tierra y la justicia, para iniciar un proceso de transformación profundo y por el derecho a soñar con un país diferente.
Recordó que este hecho ocurrió el 23 de septiembre de 1965 y tuvo como protagonistas a integrantes del Grupo Popular Guerrillero, fundado en 1964 y conformado por campesinos, maestros y miembros del Partido Popular Socialista.
Este grupo, precisó, había hecho importantes esfuerzos para denunciar a los caciques de este estado y reclamar el reparto agrario de las tierras de los latifundios; ante eso, la respuesta del gobierno fue aumentar la presencia militar en la región y vigilar de cerca las actividades de sus integrantes.
Ante esta situación, tomaron una postura radical y decidieron efectuar el asalto al cuartel, el cual resultó “en un sangriento suceso” que cobró la vida de varias personas; lo que sin duda es un acontecimiento de suma relevancia en la historia contemporánea del país, manifestó.
Laura Itzel Castillo refirió que, durante décadas, los gobiernos autoritarios negaron las graves violaciones a los derechos humanos que se extendieron desde la segunda mitad del Siglo XX, hasta hace algunos años.
Por ello, argumentó, cansados de los abusos, explotación, despojo, y en donde la represión era una política constante y no un hecho aislado, sin encontrar alternativas por la vía pacífica, fue que decidieron atacar el Cuartel de Ciudad Madera:
Arturo Gámiz García, maestro rural fue quien encabezó “este acto de rebeldía, conciencia y dignidad”, junto a él, Emilio Gámiz García, Salomón Gaytán Aguirre, Pablo Gómez Ramírez, Juan Antonio Escobar Gaitán, Rafael Martínez Valdivia, Miguel Quiñones Pedroza, Óscar Sandoval Salinas, Guadalupe Scobell, Ramón Mendoza, Florencio Lugo, Francisco Ornelas y Matías Fernández
La senadora subrayó que este grupo de jóvenes no buscaban solamente tomar un cuartel, sino iniciar un proceso de transformación profundo, querían cambiar el rumbo de la historia, querían justicia para los campesinos despojados, libertad para los estudiantes reprimidos, dignidad para los trabajadores explotados, querían que el bosque, la tierra y el agua volviera a manos del pueblo.
Hoy, precisó, “en este tiempo en que la memoria florece”, es de celebrarse el decreto de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, quien ha declarado Sitio de Memoria la tumba colectiva donde yacen los combatientes caídos en Ciudad Madera.
Laura Itzel Castillo agradeció la presencia de Rosario Piedra Ibarra, presidenta de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos y reconoció sus recomendaciones 98VG/2023 y 46/2022, que evidencian la represión sistemática hacia quienes lucharon por justicia y democracia en México.
Ese intento, apuntó, aunque militarmente fallido, inauguró una nueva fase de la lucha popular, la insurgencia armada que recogía las gestas villistas, zapatistas y jaramillistas y que más tarde darían origen a la Liga Comunista 23 de Septiembre.
Reivindicar a estos héroes, dijo, “es mantener viva la llama de la democracia”, para que las futuras generaciones no olviden el precio que se ha pagado por ella, para que nadie más, nunca más, tenga que empuñar las armas, ni entregar su preciada vida por el derecho a la justicia y una vida digna.
Su compañera de bancada, Andrea Chávez Treviño, afirmó que, a 60 años del asalto en el Cuartel Madera, a los insurgentes se les recuerda como precursores de una sociedad más justa, igualitaria y digna.
Calificó de cobardes e ignorantes” a aquellos que se atreven a cuestionar el actuar desesperado de quienes sabiendo que iban a morir tomaron en sus manos la responsabilidad histórica de pelear contra la injusticia y la represión.
Gerardo Fernández Noroña, de Morena, consideró que el asalto en Madera representa una gesta heroica y sobresaliente, en la que 13 jóvenes se levantaron contra más de cien militares, y pagaron con su vida el compromiso de transformación de la patria, porque intentaron hacer una revolución armada para poner un alto definitivo “a la injusticia, la pobreza, la desigualdad, la barbarie y la brutalidad”.
Por el PAN, Mario Humberto Vázquez Robles manifestó que honrar a los caídos de Madera, significa defender la independencia del Poder Judicial, fortalecer el Estado de Derecho, exigir transparencia y “no permitir jamás que el miedo nos paralice”, porque los pueblos cuando son traicionados se levantan, y por eso “nuestra responsabilidad es no quedarnos en la nostalgia del pasado, sino reconocer en el pasado las lecciones para el presente”.
María del Rocío Corona Nakamura, del PVEM, expresó es fundamental conmemorar este episodio de la historia de nuestra nación, así como reconocer a quienes dieron su vida ese día para hacer eco de las voces que aun claman por la reparación simbólica de los daños y el acceso a la verdad de los hechos. “Refrendamos nuestro compromiso con la transformación del país, para seguir consolidando un Estado garante de justicia y de derechos”, agregó.
Del PRI, Carolina Viggiano Austria dijo que esta conmemoración honra no sólo a los integrantes del Grupo Popular Guerrillero, sino los más altos valores de México y sus luchas históricas, porque se cumplen 60 años del recordatorio de una lucha constante por la democracia y las libertades, de un movimiento que fue la búsqueda por cristalizar el ideal de un país justo, así como de una sociedad con oportunidades y libertad
En la ceremonia también estuvo presente Rosario Piedra Ibarra, presidenta de Comisión Nacional de los Derechos Humanos; Félix Arturo Medina Padilla, Subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración, de la Secretaría de Gobernación. Así como Florencio Lugo Hernández, único sobreviviente del Asalto al Cuartel de Ciudad Madera, Chihuahua.
